Las victimas eran traídas de fuera, engañadas. Les decían que iban a trabajar en la hostelería y luego se las llevaban y las metían en clubes de alterne. Les pegaban e insultaban, les decían el dinero que tenían que pedir para luego quedárselo ellos, se quedaban incluso con las bonificaciones que los clientes les daban. No les permitían comer ni tomar nada hasta que no terminaran su jornada de trabajo.
Dos clubes han sido cerrados. A uno de los detenidos, que era un camarero, se le acusa de tráfico de drogas y a otro, el dueño de unos de los locales lo detuvieron en un aeropuerto con una cantidad de dinero importante. Lo pillaron intentando abandonar España para dirigirse a Marruecos.
Tres de los detenidos se encuentran en prisión incondicional, y los otros cinco han quedado afectados por distintos métodos cautelares.
Sinceramente, no sé por que de las ocho personas que han detenido solo tres han quedado en prisión incondicional, pienso que deberían estar así TODOS ya que TODOS han colaborado en eso. Habría que poner un castigo mayor para las personas que cometen estos delitos, son personas sin corazón ni sentimientos… ¿Qué les habrán hecho esas pobres mujeres a ellos para que hagan eso? ¿Las conocen de algo? Es solo puro y sucio negocio.
Mientras tantos, eso es lo que hay y nosotros por ahora no podemos hacer mucho ya que “la gente grande” no suele escucharnos.
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